The Fort Worth Press - "Un juicio para la historia": el caso de Gisèle Pelicot visto por los periodistas de AFP

USD -
AED 3.672504
AFN 66.097111
ALL 82.900442
AMD 380.972824
ANG 1.790055
AOA 917.000367
ARS 1434.000367
AUD 1.504891
AWG 1.8
AZN 1.70397
BAM 1.679303
BBD 2.014081
BDT 122.345769
BGN 1.679303
BHD 0.37625
BIF 2954.62156
BMD 1
BND 1.295411
BOB 6.910231
BRL 5.439604
BSD 0.999957
BTN 89.908556
BWP 13.285536
BYN 2.874941
BYR 19600
BZD 2.011162
CAD 1.38265
CDF 2232.000362
CHF 0.803927
CLF 0.0235
CLP 921.880396
CNY 7.070104
CNH 7.069041
COP 3799.167132
CRC 488.472932
CUC 1
CUP 26.5
CVE 94.676512
CZK 20.783504
DJF 178.070665
DKK 6.414904
DOP 64.002061
DZD 129.723093
EGP 47.482076
ERN 15
ETB 155.107629
EUR 0.858704
FJD 2.26045
FKP 0.750488
GBP 0.749372
GEL 2.69504
GGP 0.750488
GHS 11.375091
GIP 0.750488
GMD 73.000355
GNF 8689.3058
GTQ 7.659812
GYD 209.213068
HKD 7.784904
HNL 26.337526
HRK 6.470704
HTG 130.906281
HUF 328.020388
IDR 16689.55
ILS 3.23571
IMP 0.750488
INR 89.945504
IQD 1310.007298
IRR 42112.503816
ISK 127.980386
JEP 0.750488
JMD 160.056669
JOD 0.70904
JPY 155.360385
KES 129.352166
KGS 87.450384
KHR 4003.777959
KMF 422.00035
KPW 900.039614
KRW 1473.810383
KWD 0.30697
KYD 0.833383
KZT 505.714163
LAK 21684.626283
LBP 89549.049071
LKR 308.444597
LRD 176.001374
LSL 16.947838
LTL 2.95274
LVL 0.60489
LYD 5.435968
MAD 9.235994
MDL 17.014554
MGA 4460.567552
MKD 52.925772
MMK 2099.679458
MNT 3548.600426
MOP 8.01889
MRU 39.877216
MUR 46.070378
MVR 15.403739
MWK 1733.997338
MXN 18.174604
MYR 4.111039
MZN 63.910377
NAD 16.947838
NGN 1450.080377
NIO 36.800756
NOK 10.105104
NPR 143.853518
NZD 1.730703
OMR 0.383789
PAB 1.000043
PEN 3.361353
PGK 4.243335
PHP 58.965038
PKR 280.346971
PLN 3.63215
PYG 6877.602713
QAR 3.644958
RON 4.372604
RSD 100.802816
RUB 76.80419
RWF 1454.943545
SAR 3.752973
SBD 8.230592
SCR 13.522517
SDG 601.503676
SEK 9.40005
SGD 1.295504
SHP 0.750259
SLE 23.703667
SLL 20969.498139
SOS 570.471816
SRD 38.629038
STD 20697.981008
STN 21.036363
SVC 8.750268
SYP 11057.447322
SZL 16.934701
THB 31.875038
TJS 9.174945
TMT 3.51
TND 2.933413
TOP 2.40776
TRY 42.526038
TTD 6.778861
TWD 31.289038
TZS 2440.132229
UAH 41.981024
UGX 3537.543468
UYU 39.110462
UZS 11963.250762
VES 254.551935
VND 26360
VUV 122.070562
WST 2.788735
XAF 563.222427
XAG 0.017168
XAU 0.000238
XCD 2.70255
XCG 1.802258
XDR 0.700468
XOF 563.222427
XPF 102.399863
YER 238.550363
ZAR 16.926304
ZMK 9001.203584
ZMW 23.119392
ZWL 321.999592
"Un juicio para la historia": el caso de Gisèle Pelicot visto por los periodistas de AFP
"Un juicio para la historia": el caso de Gisèle Pelicot visto por los periodistas de AFP / Foto: © AFP

"Un juicio para la historia": el caso de Gisèle Pelicot visto por los periodistas de AFP

"Tan banal como fuera de lo común", el juicio de los violadores de Gisèle Pelicot movilizó a los periodistas de la oficina de AFP en Marsella durante varios meses, haciéndolos interrogarse tanto sobre su cobertura de los horrores narrados, como sobre la relación entre hombres y mujeres.

Tamaño del texto:

Desde el 2 de septiembre, este caso, que ha tenido un impacto excepcional en el mundo, sacó a la luz la figura de Gisèle Pelicot y ha generado un debate crucial sobre el delito de violación generalizado.

"Gisèle Pelicot llega y sabemos que ella descubre, como nosotros, estos rostros por primera vez, los de todos los hombres que la violaron", recuerda Viken Kantarci, periodista de AFPTV que cubrió el juicio con su colega del mismo servicio, Fabien Novial.

"Rápidamente nos dimos cuenta de cómo sería este juicio: algo que era bastante banal, en cuanto al perfil de las personas que teníamos enfrente, y al mismo tiempo fuera de lo común por su número y la magnitud de los hechos".

Entre los 51 hombres juzgados, la mayoría por violaciones agravadas contra Gisèle Pelicot,destaca su exmarido, Dominique Pelicot, que la drogó durante una década para violarla y entregarla a decenas de hombres que contactaba por internet. Los acusados, cuyas edades van desde los 27 a los 74 años, provienen de distintos rubros y clases: desempleados, camioneros, periodistas, bomberos, ingenieros, electricistas...

Si bien se esperaba una sesión a puertas cerradas finalmente, el primer día, Gisèle Pelicot rechazó esa opción y pidió un juicio público para "cambiar la forma en que la gente ve la violación".

- De anónima a ícono -

Gracias a esta decisión, ella "permitió que este juicio exista y, con suerte, que deje huellas en la historia", dijo David Courbet, periodista de la oficina Marsella de AFP y uno de los reporteros que han cubierto el juicio desde sus inicios.

Gisèle Pelicot habló ante las cámaras tres días después de la apertura, advirtiendo que lucharía "hasta el final". AFP, que hasta ese momento había conservado el anonimato de la víctima para proteger su privacidad, la de sus hijos y nietos, decidió publicar su nombre por primera vez, en acuerdo previo con los abogados de la familia.

"De víctima anónima, se ha convertido en un ícono, portadora de un mensaje político, universal", dice el periodista Courbet.

Desde entonces su nombre y su cara, - de melena corta, flequillo y lentes de sol redondos -, ha aparecido en grafitis, afiches y distintos mensajes de apoyo en los muros de Avignon, de París, o de Nueva York.

Avignon, la pequeña ciudad del sureste de Francia, comenzó a vivir al ritmo del juicio. La movilización feminista se intensificó, los restaurantes alrededor del juzgado se llenaron, pero con una diferencia bien conocida por los periodistas: aquellos lugares a los que iban los acusados y los otros que recibían a la parte acusadora.

"De unas pocas cámaras al principio, vimos la llegada de cámaras francesas, pero también extranjeras, de la prensa internacional, británica, estadounidense y española", recuerda Viken Kantarci.

En el vestíbulo de la sala del tribunal, se armó un ballet de cámaras, micrófonos e idas y venidas.

A partir de las 05H45 de la mañana, personas anónimas se agolpaban frente al juzgado -que abre sus puertas alrededor de las 08h15- para poder ingresar a la sala de transmisión con unos treinta asientos. Muchos esperaron en vano.

- El jardín de un hotel -

Al margen de los debates, a los que no se puede asistir, los camarógrafos y fotógrafos inmortalizaron los actos que ocurrían en paralelo: las canciones, los mítines, y dieron la palabra a los partidarios de la familia Pelicot, a los sociólogos, a los habitantes de Mazan, donde ocurrieron los hechos.

Dentro de la sala del tribunal, Benoît Peyrucq hizo sus ilustraciones de prensa, incluidas las del acusado Dominique Pelicot que han dado la vuelta al mundo.

Entre las imágenes para el recuerdo, destacó la de Gisèle Pelicot, "con la cabeza en alto", cruzando la sala entre aplausos, gente que formó una guardia de honor y que le llevaron ramos de flores.

Todo lo contrario respecto a los acusados que comparecieron en libertad, y que ha medida que pasaron los días del juicio aparecían con gorras, máscaras y capuchas para preservar su anonimato, algunos de ellos "más agresivos con los periodistas", compara Viken Kantarci.

"Dejamos mucho espacio a Gisèle Pelicot y su familia, porque podemos imaginar lo que han tenido que soportar", cuenta por su parte Christophe Simon, fotógrafo de AFP desde hace casi 40 años. Ha habido en esta cobertura un respeto y una delicadeza que no ha visto con otras historias mediáticas que cubrió.

A diario el fotoperiodista creó un lazo con la víctima y sus abogados. "Un día me caí delante de ella y ella misma me levantó", recuerda.

El 23 de octubre, los abogados de Gisèle Pelicot acceden a su pedido de participar en una sesión de foto con ella y se dan cita a media tarde en el jardín de su hotel.

"Fue un momento ameno", dice Simon. Él le confía que ha cubierto guerras, zonas de riesgo y que tiene dificultades para salir de "la oscuridad". Le dice, también, que frente a lo que ella está pasando, la encuentra "impresionante".

"Parecía sorprendida e interesada", dice el fotógrafo, cuyos retratos de Gisèle Pelicot posando en medio de un jardín soleado, con los ojos plantados en el lente, se reprodujeron en la prensa mundial.

- Hechos sórdidos - 

La crudeza de estos cuatro meses de juicio. "La repetición de la violación de una mujer es algo que obviamente marca mucho, y también nos damos cuenta de hasta qué punto este caso ha roto una familia", explica Isabelle Wesselingh, entonces directora de la oficina de Marsella, que coordinaba toda la cobertura con su adjunto Olivier Lucazeau.

"Lo que puede parecer complicado es que hay que tener en cuenta que un juicio requiere un debate contradictorio, dar una palabra justa a la defensa, cuestionar las cosas, lo que no significa minimizar el sufrimiento", explica.

En línea con las directrices editoriales de AFP sobre la cobertura de la violencia sexual, el equipo se ha ceñido a la terminología que debe adoptarse para diferenciar "el voyeurismo y la cobertura de hechos a veces realmente sórdidos, teniendo siempre en cuenta la dignidad de las víctimas", añade.

El tribunal había prohibido inicialmente al público y a los periodistas acceder a los videos, filmados y subtitulados por el acusado, Dominique Pelicot, una decisión a la que se opusieron las partes civiles para que se pudiera mostrar todo.

David Courbet estaba "más bien a favor" de verlos. "En la audiencia, me di cuenta de lo importante que fueran vistos, porque son elocuentes y conforman el juicio.

Para hacer frente a la brutalidad, el periodista trata de aferrarse a "imágenes de la vida cotidiana".

Gisèle Pelicot "estaba acostada, sin reaccionar (...) Podíamos escuchar claramente los ronquidos", dijo Philippe Siuberski, un periodista de AFP basado en Montpellier, que también ha estado cubriendo el juicio desde la apertura.

"Hacemos nuestro trabajo como periodistas, pero no es necesariamente algo que sea muy agradable de ver. Lo miraba durante 2-3 segundos, luego volvía a mis notas, veía la reacción de Dominique Pelicot, la de Gisèle Pelicot... ", añade el periodista, que un día prefirió abandonar la sala antes de la emisión de un video de 15 minutos.

"Más que las palabras, la imagen se queda en la retina y eso puede despertar cuerdas sensibles", dice Siuberski, trazando un paralelismo entre lo que vivió en Aviñón y lo que vivió durante la cobertura del juicio del pedófilo Marc Dutroux, juzgado en 2004 en Arlon (Bélgica) por secuestro, rapto, violación y asesinato de niñas y adolescentes.

- "Gracias Gisèle" -

Por casualidad del calendario y del personal de que disponía AFP Marsella, este juicio tan simbólico de la violencia sufrida sobre todo por las mujeres, fue cubierto casi exclusivamente por hombres.

"Idealmente, habría sido bueno tener un binomio hombre-mujer, pero tuvimos que lidiar con la disponibilidad y las reticencias que hechos como estos pueden suscitar, y respetarlos", explica Isabelle Wesselingh.

Sin embargo, es "interesante de tener hombres confrontados a cuestionamientos sobre la masculinidad, el comportamiento de 50 hombres comunes" para "ampliar la mirada de la violencia contra las mujeres".

"De hecho, esto me hizo plantearme el tema del consentimiento", reconoce David Courbet. "Este juicio nos obliga como hombres a hacernos preguntas sobre nuestro comportamiento pasado, presente y, especialmente, futuro", afirma.

Para Philippe Siuberski, el impacto se debe principalmente a la personalidad de Gisèle Pelicot, que "nunca se salió de la línea de lo que quería decir" con "fuerza y mesura". "Es bastante admirable", agrega.

"Es difícil" ponerse en sus zapatos, dice Viken Kantarci. "Como periodista no debería, pero quiero decir +Gracias+".

Declaraciones tomadas y editadas por Jessica Lopez

B.Martinez--TFWP